lunes, 19 de abril de 2010

Ansiedad

Y se dio el día 17, entre quebrantos siento amarte, eres dueño de los besos que apasionan mi alma que llegan a balancearme de un lado al otro, produciendo ese cosquilleo bobo en el estomago.
Me embriaga sentir tu respiración en mi cuello y el latido de mi corazón es mas intenso cada vez que te recuerdo.
Ayer 17, estabas ahí sentado frente a mi con esa sonrisa hermosa que me hace volar en sueños mientras me besas, ese aliento amatorio y tu aroma a jazmines proyectan en mi mente tu presencia cuando no siento tu piel.
Arriesgué mi alma para tenerte amarrado a mi pecho, te envolví en papel de poesía fresca, era yo capaz de todo por ti y los detalles menos adecuados podía planear, pero nunca me dejaste hacerlo...
Culpable me declaro por matar a mi orgullo y crear un mundo de fantasía, por querer amarte a tu modo y ser infeliz al irme a casa, tu nombre en mis labios son como llanto mudo y locura ansiosa...
Dime que puedo hacer para huir de tu recuerdo, que hago para amarrar mis manos y no llamarte, que hago para secar mis lágrimas cuando me invade los celos al imaginar que otra puede ser tu dueña, dime por que no me quieres, dime que falta en mi persona para que tu te sientas orgulloso de pasear conmigo de la mano?.
Mis fuerzas las pierdo entre escritos rojos bañados de sudor mientras las ansias mantienen despeinado mi cabello y el maquillaje corrido por mis mejillas son las pruebas de la demencia que produce tu ausencia, el aire me falta al saber que no me amas que no me quieres, al saber que ni me cuentas en tu vida...
Sola con mi soledad, sola con tus recuerdos, sola con mis pasiones, sola con tus detalles pasados, sola con tu nombre revoltoso en mi cabeza, sola con los latidos, sentimientos de amor que deberé evitar y si me ayudas a olvidar...
Espero lograr descansar esta noche sin soñarte una vez mas.